Saludo de Carlos Coronel

Queridos hermanos:

Sólo envejece aquel a quien se le arrugan los sueños, los ideales, no a quien se le arruga la piel.
Sólo está ausente quien no enfrenta los desafíos constantes de la vida en todos sus aspectos, de sus sueños y sus ideales.
Está siempre presente quien cumpliendo estas premisas, abandona su cuerpo físico para seguir luchando en otras dimensiones, desde otras dimensiones.
Mi respeto y admiración a quienes nos precedieron en este viaje sin retorno.
Que descansen en paz lejos del polvo del camino y que nos separen un sitio de honor en el salón de los valientes.
Un abrazo del alma a todos Uds.y que junto con Amado Nervo podamos decir al final de nuestros días: “… vida nada te debo, vida nada me debes,… vida estamos en paz”



Carlos Coronel